jueves, 24 de abril de 2008

LA SIRENILLA CRISTIANA




...AAAA!

¡De los naranjos del mar!

la sirenilla cristiana,
gritando su pregonar
de tarde, noche y mañana

...aaaa!

¡De los naranjos del mar!





Pero en el concurso
no puede est..aaaaarrr
porque esto es del gra....aaaaaan
Alberti... y.. mi "carnavaaal".

Una pequeñita broma, y de paso, quien no conocía el poema, ya lo conoce.

miércoles, 23 de abril de 2008

Ahora sí

Suena el sol, verificado horizontalmente y de una manera totalmente inequívoca. Por fín, el nuevo estadillo inconcluso, que según mi nefasta memoria data de varios años, vuelve a la senda de la virginidad, de la propiedad misma, de la creatividad sonriente. Qué puedo decir, mi mente no logra acelerar los dedos sobre la máquina, siento un resplandor concubino en ambas manos que al enfrentarse al acantilado de la punta de las yemas parece darle un espantoso y horroroso pudor que prefiere no apagarse y quedarse dentro mismo de mis extremidades, y volver a recorrer el camino en dirección contraria. La obligación es por obligación misma, y es por eso que lo estáis sabiendo, pero mi yo interno me contradice, no me deja compartir la sensación tan esperada después de mucho.
No debo escribir más, me lo quedo para mí.

martes, 22 de abril de 2008

antes del naufragio (de Espejismos; dentro de la obra inconclusa HERIDAS EN FLOR)

Un poquito de poesía no viene mal tampoco. Esto es un poemilla, que no sé si llega a alcanzar el rango de poesía pero que lo intenta. Es un género demasiado dificil.

Unos irresistibles ojos oceánicos
bañan mis suaves costas
bahía henchida de barcos
que ponen rumbo a la aurora

Zarparon esperanzas
Velas azotadas por un sueño

La nieta

Este es un relato que hace tiempo que escribí. Lo pongo urgentemente para no dejar en manos de mi hermano el nivel literario de nuestro blog. Jeje. Los chocos tiene tinta, pero no pluma. DEDICADO A MI QUERIDA SOBRINA GALA (y un beso para luna y elén, a las que ya les dedicaré otra cosa, con la promesa de escribir algo nuevo de verdad).

La nieta:

Fue mi madre quien la vio. Durante aquel tramo de la mañana mis sobrinas jugaban a ayudar en la limpieza doméstica. Entretenimiento que exige esa predisposición inmanente hacia las cosas que normalmente solo tienen los niños: el candor.
Recibieron un paño húmedo cada una para que lo esgrimieran contra el polvo y, como si sostuvieran una muñeca, se adentraron eufóricas en las habitaciones y en el juego.
Yo estaba durmiendo y no lo vi. Casi mejor, porque hubiera llorado.
Me dijo mi madre que estuvo un rato sin sentir a la menos pequeña. Esto no tendría nada de particular si no me hubiera estado hablando de Sofia, una criaturita dulce pero un pelín ruidosa.
Mi madre se extrañó, dejó el puchero y salió a ver qué hacía. Rápido la encontró. La vio en medio del pasillo, ensimismada pasando el trapo suavemente, una y otra vez, sobre un pequeño marco, que suele convivir junto con otras fotos de familia, encima de un mueble de silencioso mármol y madera.
Sofía parecía mirarlo más allá. Mi madre se acercó y le dio un vuelco el corazón cuando reconoció el retrato de mi padre entre sus manos. El corazón lo comprendió todo. El pasillo se había limpiado hace poco. Y sobre todo esa foto…no podía tener ni una mota de polvo.
- Sofía ¡¡, (la pequeña volvió la cara sin dejar de pasar el paño sobre mi padre). ¿echas de menos al yayo, verdad?.
Y en Sofía se fraguó un gesto, preludio de una respuesta milagrosa: Sofía rompió a llorar. Desconsoladamente. Fue el nacimiento de un río. Néctar de flores de duelo. Sofía lloró. Fue seguramente la respuesta perfecta. La omisión más precisa. La expresión. Sofía no podía decir y lo dijo todo. El llanto tomo su voluntad como un rescate.
Supongo que mi madre también lloraría - y estoy llorando hasta yo- .
Después de comer fue cuando me lo contó todo. Aprovechando que las niñas estaban en el patio (jugando). Yo tomaba fruta, como nunca, y mi madre me acompañaba con su relato, ya comida, como siempre (¿quien me esperaría hasta tan tarde?).
No pude comer bien. La imagen de la niña, que nunca pareció afectada, llorando a mi padre me conmovió hasta las entrañas. La muerte de un ser querido es una herida que se mantiene en flor durante muchas estaciones, pero con primaveras desapercibidas.
Es curioso que, como en mi caso, mis sobrinas lloren más ahora que cuando ocurrió. Y es que la muerte solo se comprende, momentos en que más duele, a medida que la ausencia va dibujando sus contornos en el tiempo.

NUBE


Nube es mi segundo nombre, y VIGILIA es un estado, no de Estados Unidos, sino un "estado", DE ESTAR. Es el momento en el que uno no sabe si está aquí o allí, si quiere estar aquí o quiere estar allí, si está despierto o está dormido, si la verdad es verdad o es un puro tránsito hacia la verdadera verdad. Verdadera verdad, sí, verdad absoluta. Aristóteles creía que uno nacía y luego aprendía y Platón decía que uno aprendía y después nacía, y yo, Nube, busco la verdadera verdad, la absoluta. Aristóteles, Platón y Nube; bueno, pues ya tenemos la verdad, y la verdad es que la verdad es subjetiva si es verdad, y si no, qué mas da, para qué la queremos si no es verdad; que tampoco quiere decir que sea mentira, porque no por no ser verdad es mentira, puede ser mentira sin ser verdad y puede ser verdad sin ser mentira, y mentira siendo verdad, y verdad siendo mentira. En fín, divagando en la vigilia no logro encontrar la verdad, por muy creativo que sea este estado, como decía Sánchez Dragó el otro día; ... ¡pero además es que tampoco sé si es mentira!. Creo que me voy a enajenar, dejar mi vigilia y Dios dirá...si Dios es verdad,... y si no, pues también.


El sabio más sabio de todos los sabios

Hoy voy a contar una historia que me contaron recibiendo un curso de formación y que me impactó el efecto motivador que tiene en quien lo escucha: Resulta que en un pequeño pueblo del cual no recuerdo su nombre, aunque sí tengo la certeza de que era de mar, y esto lo digo por la piel curtida y plagada de pliegues debido a la brisa marina del sabio más sabio de todos los sabios, vivía este personaje. Era una persona formada por la atmósfera y el mundo que lo rodeaba, y por la gran biblioteca que tenía escondida en su humilde cueva donde moraba. A simple vista era un vulgar marinero, pero todos en ese pequeño pueblo y sus alrededores lo idolatraban, era el sabio más sabio de todos los sabios. La gran atracción del pueblo ocurría los domingos, después de la misa de doce; los vecinos se reunían alrededor de la fuente de la plaza mayor, y única, donde se sentaba el sabio sobre la piedra húmeda y verde, salpicada intermitentemente por las gotas que sembraban de ondas el desgastado estanque. Todos formaban un corro a su alrededor y lo bombardeaban a preguntas, a las cuales el sabio más sabio de todos los sabios respondía de una manera espontánea, ¡lo sabía todo!. Era sorprendente, cualquier pregunta que le fuera hecha la contestaba sin dilación.
Pero un día, dos chavales del pueblo, adolescentes de catorce años, idearon la forma de engañar al sabio.
- ¡Eh, tú! Ya sé qué hacer para que el viejo no sepa contestar.
- Eso es imposible, cuéntame.
- Verás, atrapamos un pajarito, vivo, lo encerramos en la mano, y le preguntamos si el pájaro está vivo o está muerto. Si dice que está muerto, abrimos la mano y lo dejamos volar.
- ¿Y si dice que está vivo?.
- Si dice que está vivo, ¡crack!, le aplastamos la cabeza al pájaro con el dedo gordo.
- Buena idea.
El mismo domingo por la tarde atraparon al pobre gorrión, lo metieron en una jaula y esperaron impacientes hasta el ansiado momento en que el cura diría "podéis ir en paz". Y llegó esa hora, y todo el mundo se reunió alrededor del sabio, y la gente del pueblo, y de los alrededores, le hacían preguntas que el sabio más sabio de todos los sabios contestaba inmediatamente. Y en una de éstas, el sabio se fijó en la mano alzada con el dedo mirando hacia el cielo del autor de la idea, y le pasó el turno.
- Dime chico, ¿cual es tu duda?
- A ver sabio, tú que eres el sabio más sabio de todos los sabios, ¿me puedes responder a esta pregunta?.
- Hazla pues.
Y levantando la otra mano gritó: - El pájaro que tengo en la mano ¿está vivo o está muerto?.
Y el sabio se quedó mudo por un momento, y agachó la cabeza. Nadie había visto al sabio más sabio de todos los sabios hacer eso jamás, nunca se había parado a pensar antes de contestar. Y pasó un minuto, y el viejo seguía con la cabeza agachada, y la gente comenzaba a murmurar; y pasaron tres minutos, y los vecinos dolidos profundamente se decían unos a otros - ¡éste no es el sabio más sabio de todos los sabios!, y pasaron cuatro minutos, ...
Y en el minuto que hizo cinco, cuando el gentío comenzaba a disgregarse, el sabio más sabio de todos los sabios levantó la cabeza, levantó la cabeza y miró al chaval, y también observó las caras de incertidumbre de todos los presentes, e hizo ademán de hablar, se paró y habló. La respuesta del sabio fue la siguiente:
- Chico,... la solución... está.... EN TUS MANOS.


Y ésta es la historia que nos quiere hacer comprender, sobre todo si los que habéis leido esta historia sois estudiantes, que la solución a los problemas y a la consecución de metas está en nuestras manos, y que lo que queramos conseguir lo podemos hacer luchando y estudiando con ahinco.

lunes, 21 de abril de 2008

¿Y... esto qué es?


Es un diseño fotosintético

con espíritu regocijante,

alma de belleza,

y olores fascinantes.

Es un maletín polivalente

cuya finalidad reside

en la felicidad reciente.

domingo, 20 de abril de 2008

2ª parte del "CURZO D´ANDALÚ" (FUERA DE CONCURSO)

Esta es la segunda entrega del "curso de andaluz" en tono humorístico. La primera parte, mejor que ésta, la podéis ver en la sección "vídeos" de nuestra página web http://www.centroeos.com/. ¡ojo! ESTAS ENTRADAS TAN SÓLO ESTÁN PERMITIDAS AL ADMINISTRADOR, Y ES UNA EXCEPCIÓN CON LA SIMPLE FINALIDAD DE RELAJARNOS UN POCO, pero no admite comentarios ni puntuaciones puesto que está fuera de concurso.


LUNA


Luna es el nombre de mi hija pequeña, tiene tres años. Está sentada junto a mí sobre una caja de un material parecido al mimbre donde guardo cosas intranscendentes que algún día irán a la basura. Juega con su compañero de fatigas, su biberón, que se ha convertido en parte de su cuerpo, pues, y muy al contrario que sus dos hermanas mayores que jamás quisieron ni bibi ni chupe, ella duerme y es acompañada a todas horas por su gran amigo. Pero, si observo la gran mentalidad de los pequeños, me doy cuenta de que el gran amigo es totalmente sustituible, pues el otro día en la farmacia le compré uno nuevo y, ha cambiado de amigo. Lo material es material a toda costa, y ese coste no lo comprendemos algunas veces los mayores cuando nos "atachamos", como dirían los franceses, a cosas totalmente superficiales y prescindibles. Luna va vestida de rojo y verde, dos colores que en la paleta son complementarios, es decir, opuestos, pero que en su figurita de porcelana fina devienen el suplemento perfecto. Mi niña pequeña es un tesoro, tan grande como lo son mis otras dos grandes o quizás no tan grandes; como decía mi padre, nada es verdad ni es mentira, todo depende del color del cristal con que se mira.

LLUVIA DE ABRIL

Llueve, no es costumbre por estos lares, donde la sequía hace sus estragos más profundos desde hace treinta años (al menos es lo que dicen, aunque todos los años se oye el mismo "quejío"). Y digo quejío porque yo, personal y subjetivamente, odio la lluvia, objetivamente sé que es necesaria, pero yo la detesto, o más bien me incomoda, me desequlibra la "Bios", prefiero el caluroso esplendor de un día radiante y soleado.

EOS es la Diosa de la Aurora, todas las mañanas se alza sobre su carro, tirado por sus caballos alados, desde las profundidades del océano para abrirle las puertas del cielo a su hermano Helios, el SOL. ¿Qué te ha pasado hoy, mi diosa? ¿Acaso estás enfadada con nosotros los humanos? ¿No te gusta lo que le estamos haciendo a esta bola de alcanfor donde vivimos? A mí tampoco, pero no por tal tengo que enojarme y romper a llorar como tú, aunque a veces dan ganas.

¡Vaya!, un rayo de luz hace vislumbrar un gran arco de colores; aquí se acaba la historia escrita, y comienza la observación y la
meditación absorta.

LLAMO A CRONOPIO

Como hacían los antiguos habitantes de las tierras colonizadas en el norte de América, echo mi manta en la hoguera y hago la llamada, y espero, espero ver nubes ambiguas de humo en la otra colina que respondan a la señal. Seguro que aparecerán dibujando siluetas inimaginables. Observad y decid si me equivoco, hay que tener paciencia. Ya veremos el humo, no para venderlo ni subastarlo, sino para contemplarlo y cultivar nuestro ego con él. ¿Ascetismo?